Hoy, al igual que hice en el programa 23, toca hablar de un indie muy tranquilo. Un juego para pasar un rato relajado. ABZÛ es una obra creada por algunos de los padres de Journey, un walking simulator del que ya hablé someramente la temporada pasada. ABZÛ está ambientado en un precioso fondo del mar, tremendamente poblado de plantas y peces de infinidad de colores. Su función principal es hacer que te pares a mirar, con calma, con mucha calma. Su duración máxima es de 3 horas pero si no te paras puedes terminarla en una hora u hora y poco.

Miembros de la compañía Thatgame se separaron para crear un proyecto común llamado The Giant Squid. Una de sus primeros juegos es este ABZÛ del que hablo. El director de arte, Matt Nava, y el encargado del sonido, Austin Wintory, son los encargados de dar vida a esta maravilla visual y sonora que busca conectar jugador y juego a través de la calma y el relax y alejarse del estrés de otros títulos.

Este último, Wintory, se ha hecho un nombre en el mundo de las bandas sonoras, tanto en cine como en videojuegos, con solo 33 años. Journey, The Order 1886, Assassin’s Creed: Syndicate, son solo algunos de los títulos en los que ha dirigido y/o compuesto. A pesar de no conseguir el BAFTA a la mejor música, Wintory, siempre fue uno de los favoritos. No obstante Virginia, otro titulo indie basado en la narrativa, ha sido el que ha desplazado a ABZÛ en esta categoría. Su compositor es Lyndon Holland.