Basada en una novela y con su posterior musical, os traemos a la web y al programa la historia de Matilda. Creada por Roal Dahl en 1988 poco tardaría en adaptarse al cine debido a su repercusión y en 1996 David Newman le dio música a dicha película.
Este film no sólo fue la catapulta perfecta para la actriz Mara Wilson (Matilda), sino que fue un icono para las generaciones de los años ’90. La protagonista vive rodeada por una familia que la cohíbe y la prohíbe leer, conocer gente y desarrollarse como una niña feliz de entre 2 y 6 años. Poco a poco va ampliando su mundo y, tras su leitmotiv principal en New Born al principio de la película, Newman nos presenta su desarrollo en Matilda Writes Her Name y To Te Library And Beyond.
Entre sus hobbies no sólo está la lectura sino que Matilda disfruta pensando cómo fastidiar a sus padres y mejorando sus habilidades mentales. Hay una escena en la película en la que sus poderes y su vitalidad confluyen a ritmo de Little Bitty Pretty One, de Thurston Harris. Es una de las escenas más icónicas y su música, publicada en 1957 es, además, una de las dos canciones de esta banda sonora no compuestas explícitamente para la película.

El otro par de actrices más importantes en la película son Embeth Davidtz (Ms. Honey) y Pamela Ferris (Miss Trunchbull). Estas antagonistas forman parte de la plantilla de Crunchem Hall, el colegio al que irá Matilda. La primera será su profesora, tutora escolar y posteriormente la adoptará en su casa y formarán una familia. La segunda es la directora y regenta su institución a base de mano dura, castigos e imposiciones.
Honey tiene un tema propio, Miss Honey, en el que la flauta hará la melodía principal y la cuerda el colchón que se repetirá en Adoption, uno de los temas finales del film. Trunchbull, por su parte, no tendrá uno tan destacado pero sí varios cargados de vientos metal de registro grave que reforzarán sus momentos de ira. Uno de los más relevantes y que sirve como primer impacto de su fuerza ante Matilda es Hammer Throw. La escena habla por sí sola pero cabe destacar el contraste entre el caótico momento del lanzamiento de martillo con la esperanza transmitida en el melódico final.
Muchos otros temas suenan en la película y un puñado más en el programa pero, frente a la banda sonora de David Newman, durante el largometraje nos encontramos con un nuevo tema que se hizo muy popular gracias al film y que es coreable por todo fanático.
Durante el primer tercio del minutaje Matilda está haciéndose unas tortitas y es en ese momento cuando la banda Rusted Root entra en escena con su Send Me On My Way. Este conjunto hippie publicó la canción en 1992 y ha dado vida a otras bandas sonoras como la de la película Ice Age. Es un gran cierre para el post pero cabe una última mención a todas las otras pistas audibles en el programa y a las ocultas a lo largo de la película.